viernes, 18 de septiembre de 2009

La farola, el banco y el mendigo


Arropado por su blanca luz
cubrió su cuerpo en su eterna resaca
mientras descansaba sus costillas
en los maderos de su otra fiel amante,
todas las noches un mismo ritual
el apuraba su cartón de vino de oferta
y ellas, amándolo en sus sueños,
una iluminando sus frías noches
otra recogiendo sus cansados huesos
pero sordo a sus calladas atenciones
sólo miraba en sus bolsillos
por si mañana se podría embriagar
y sobrevivir a la vida un día más.

©Ike

4 comentarios:

≈♦ Mi Sentir ♦≈ dijo...

esta hermoso el escrito amigo , espero estes bien y que disfrutes del fin de semana
un abrazo para ti.

Ángel Iván dijo...

Grazie, tengo un poco desatendido el espacio, no porque haya escrito poco que no es así, es que mucho no me gusta o no pasa mi propia censura, celebro que este te gustase, feliz fin de semana y un besote.

Valeria dijo...

Qué imagen fuerte la de este poema, me da un poco de angustia ...

Ángel Iván dijo...

Hola Valeria, perdonar mi ausencia, ya he terminado mi periplo medico y todo ha ido
"benne". Estas fechas que se acercan me gustan muy poco, todos tenemos que ser felices porque lo dice el guión y yo cada día encuentro cada día más a gente durmiendo en la calle y rebuscando en la basura de los supermercados.
Un besote enorme.

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