Puso agua a sus flores recién cortadas
con sus tallos infinitos y erectos como soldados en firmes
ninguno de ellos escuchó diana aunque los vistan con banderitas,
ninguno de ellos escuchó diana aunque los vistan con banderitas,
se peinó frente al espejo en directo
para mentirnos cinco minutos más tarde en diferido,
en parte y forma de simulación y sin retenciones,
nos tomó por tontos
y se querelló con el portero del Alcorcón (*)
porque hizo una pedorreta,
mientras mi vecina del cuarto
mientras mi vecina del cuarto
comió un yogur caducado como celebración
hoy su hijo ha encontrado un comitre a tiempo parcial
pasea el perro de la vecina de la mujer de las flores
barre la jaula del hámster de su prole
y sonríe cada vez que lo azotan con la fusta,
sinceramente, hoy puede ser un día de mierda
mañana, quién sabe.
©Ike
©Ike
* nota: ni idea de como se llama el portero del Alcorcón y ni idea de si la sugerida del diferido o su vecina tienen perro, hámster o les va el sado, pero eso de 31 parados menos me ha tocado las narices.